“La
Vida Consagrada en la Iglesia hoy: Evangelio, Profecía y Esperanza”, este es el
lema del año dedicado a la vida consagrada que ha lanzado el Papa Francisco: una
llamada a poner en el centro de nuestras vidas el EVANGELIO con el compromiso
de ser PROFETAS que anuncian el proyecto de AMOR, JUSTICIA, PAZ para toda la
Humanidad, y también a ser PROFETAS que denuncian todo lo que atenta contra la
vida del COSMOS y lo que destruye la Dignidad de todo SER HUMANO. Los
consagrados/as estamos llamados a ser ESPERANZA ACTIVA, haciendo visible el
rostro de Dios que acompaña a la Humanidad hacia la NUEVA CREACION.
El perfil de LA PALOMA corresponde en árabe a la palabra PAZ:
la vocación de la vida consagrada es una llamada a ser colaboradores en la
reconciliación universal, personas de encuentro y diálogo de religiones,
culturas, pueblos…
Las AGUAS formadas por piezas de mosaico, indican la
complejidad y la armonía de los elementos humanos y cósmicos. El Espíritu,
representado por la paloma, planea sobre las aguas, a veces en un mar de
hostilidades y oscuridades. Día y noche, sin cesar está dando su soplo de vida y sosteniendo la vida con
gemidos y dolores de parto. Así también los consagrados/as nos movemos
inspirados por este Espíritu del Bien que es más fuerte que el mal.
Las 3 ESTRELLAS expresan la circularidad y la relación del
Amor de la Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) que es la fuente de donde
mana la vida consagrada. Llamados y enviados a las diferentes realidades del
mundo, con los diferentes carismas a
vivir como Jesús los consejos evangélicos: Celibato por el Reino, la obediencia
a la Voluntad de Dios y la pobreza porque nuestra única riqueza es Dios y su proyecto
de Amor para tod@s.
El pequeño GLOBO POLIEDRICO significa el mundo con la variedad de pueblos
y culturas, como afirma el Papa Francisco (Ver Evangelii Gaudium EG236). El soplo del Espíritu lo
sostiene y lo conduce hacia el futuro. Invitación a los consagrados y a las
consagradas a que seamos “portadores del Espíritu (pneumatophóroi),
hombres y mujeres auténticamente espirituales, capaces de fecundar secretamente
la historia”
El
logo es inspirador, nos aporta el Viento del Espíritu que siempre es creativo,
trae frescura, libertad y gracia. Y si colaboramos con El, es capaz de hacer
todo nuevo. Este Espíritu Santo que está presente con su aliento en todas las
culturas, lenguas, religiones y pueblos de la tierra. Suscita vínculos de
comunión en la diversidad y nos transmite el AMOR DE LA TRINIDAD de donde mana
la vida consagrada, REGALO PARA EL MUNDO.
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